Logopedia
¿Qué es la logopedia y para qué sirve?
Es la profesión universitaria que se encarga de prevenir, evaluar, diagnosticar e intervenir en las alteraciones de:
- Voz
- Habla
- Lenguaje
- Audición
- Deglución.
Su objetivo es optimizar la capacidad del individuo mejorando su calidad de vida al conseguir una adecuada comunicación y una correcta realización de las funciones orales no verbales. Para ello, será necesario hacer detección precoz para hacer un tratamiento precoz, rehabilitar cuando el trastorno ya está instaurado y, cuando la recuperación total no es posible, mejorar la función lesionada y mantenerla el máximo tiempo posible.
El logopeda participa en un equipo multidisciplinar junto con otros profesionales como psicólogo, otorrinolaringólogo, ortoprotésico, pediatra, neurólogo, cirujano maxilofacial, nutricionista, rehabilitador, etc.
¿Qué pacientes se benefician de una consulta logopedica?
El logopeda trata a pacientes de todas las edades, siendo susceptibles de su tratamiento:
- El 15% de los recién nacidos que serán atendidos en Atención Temprana,
- El 25% de niños en edad escolar sobre todo en relación con problemas de aprendizaje,
- 12% de población entre los 18 y 65 años sobre todo en problemas de voz y secuelas después de un ictus,
- Y el 14% de los mayores de 65 años en frecuente relación con ictus o problemas neurodegenerativos como demencia.
¿Qué materiales se usan en la consulta del logopeda?
- Para exploración usa depresores, espejos, guantes, velas, comida, agua
- Para diagnóstico usa distintos tipos de test:
- Test generales de lenguaje
- Test específicos de lenguaje
- Test de lectoescritura
- Test de inteligencia
- Escalas de desarrollo evolutivo
- Test neuropsicológicos
- Para tratamiento usa materiales variados, divertidos e imaginativos como fichas, puzzles, juegos de palabras, etc.
- Para pacientes con mayores problemas de comunicación usa y enseña sistemas aumentativos/alternativos de comunicación.
¿Cómo se estructura la consulta del logopeda?
La dinámica de trabajo que sigue es la siguiente:
- Entrevista a los padres o al paciente, para recoger la historia clínica y conocer lo que demandan.
- Evaluación del paciente
- Entrega del informe logopédico del paciente con las indicaciones necesarias.
- Intervención de los problemas detectados tras la realización de un programa de intervención.
- Evaluación de la intervención
- Alta del paciente con recomendaciones o seguimiento.
1. PROBLEMAS DE LA VOZ:
- Afonías
- Disfonías
- Nódulos vocales u otras lesiones benignas de cuerdas
- Parálisis de cuerda vocal
2. PROBLEMAS DEL HABLA:
- Defectuosa pronunciación de algún fonema por dislalia o disglosia
- Tartamudez o disfemia
- Disartrias: por defectuosa coordinación articular o muscular
3. PROBLEMAS DE LENGUAJE DE COMPRENSIÓN Y DE EXPRESIÓN:
- Problemas de lectoescritura: como la dislexia y la disgrafia
- Retraso del lenguaje
- Disfasia o trastorno específico del lenguaje TEL
- Autismo
- Parálisis cerebral
- Déficit intelectual
- Afasias
4. PROBLEMAS DE AUDICIÓN:
- Hipoacusias prelocutivas: antes de empezar a hablar
- Hipoacusias postlocutivas: después de adquirir el habla
5. PROBLEMAS DE DEGLUCIÓN
- Deglución atípica: en problemas dentales, mandibulares o con malos hábitos.
- Disfagia: dificultad para tragar.
6. OTROS TRASTORNOS
- Demencias: como el Alzheimer
- Trastorno de déficit de atención con o sin hiperactividad
Nuestros Profesionales de Logopedia
- Dña. Raquel Huertas
¿CUANDO ACUDIR AL LOGOPEDA?
- Cuando un niño tenga problemas en su desarrollo evolutivo a nivel de lenguaje, habla, audición, voz, trastornos psicomotores, cognitivos, etc.
- Cuando un niño tenga problemas de habla como dislalias al pronunciar un fonema mal siendo mayor de 4 años, disglosias por malformación como frenillo corto o labio leporino, disfemias o tartamudez, disartria por mal control muscular.
- Cuando un niño tenga problema con la lectoescritura por dislexia o disgrafía.
- Cuando el niño tenga dificultad en adquisición de lenguaje en comprensión o expresión por un simple retraso del lenguaje, una disfasia o TEL, paralisis cerebral, autismo, etc
- Cuando exista problema de voz por disfonías o afonías por problemas de laringe.
- Cuando haya problema en el lenguaje una vez ya adquirido como en las afasias producidas por traumatismos craneoencefálicos o accidente cerebrovascular o en demencias como el Alzheimer.
- Cuando el paciente tiene problema de sordera o hipoacusia, facilitando al niño el aprendizaje del lenguaje usando, si es necesario, sistemas alternativos/ aumentativos de comunicación.
- Cuando el niño presenta déficit de atención con o sin hiperactividad.